Erika llegará a Cuba este fin de semana debilitada y en forma de depresión tropical con vientos de 65 kilómetros por hora, tras dejar fuertes lluvias el viernes en Haití y la República Dominicana, informó este sábado el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
En su boletín de las 09:00 GMT, el NHC explicó que la tormenta estaba situada en ese momento aunos 125 kilómetros al sur de Guantánamo, en la isla de Cuba, y se mueve a una velocidad de31 kilómetros por hora en dirección oeste noroeste.

Según el CNH, con sede en la ciudad de Miami, la tormenta ha perdido fuerza hasta reducir la velocidad de sus vientos a 65 kilómetros por hora, tras atravesar Haití y la República Dominicana.
Se mantienen alertas de tormenta tropical para el noroeste de Bahamas, las provincias cubanas de Ciego de Ávila, Camagüey, Las Tunas, Holguín y Guantánamo.
El centro meteorológico advierte también que las autoridades deben vigilar también el paso de la tormenta por el sur de la Península de la Florida y los Cayos, en Estados Unidos, donde podría volver a coger fuerza.
El centro de la todavía tormenta tropical Erika se encuentra cerca de la latitud 19.1 norte y longitud 75.1 Oeste, se mueve en dirección hacia el oeste noroeste a cerca de 31 kilómetros por hora, rumbo que mantendrá a lo largo de esta noche.
El NHC pronostica que Erika podría dar un giro hacia el noroeste y disminuir su velocidad de avance el domingo, tras atravesar Cuba esta noche.

Según el NHC, se espera que Erika se siga debilitando, e incluso podría degenerar en un canal de baja presión.
No obstante, Erika seguirá provocando fuertes lluvias todavía en la República Dominicana, Haití y el este de Cuba este fin de semana.
Estas lluvias podrían causar inundaciones repentinas y deslizamientos de lodo que pueden poner en peligro la vida de las personas.
Causa estragos
Las autoridades de Haití dispusieron unos 2,000 refugios de emergencia, con kits higiénicos, colchones y comida, capaces de albergar a más de 47,000 personas.
Según un balance primario, tres personas resultaron heridas en la región de Puerto Príncipe, donde hubo viviendas colapsadas. También se reportaron inundaciones en dos zonas.
Asimismo, 254 presos de la cárcel de Gonaïves fueron evacuados en forma preventiva, pues el presidio se encuentra en una zona de alto riesgo de inundación.
Muchos hogares son precarios en Haití, y más de 60,000 personas aún viven en casas de emergencia tras el devastador terremoto de 2010, que dejó más de 250,000 muertos y dañó la infraestructura.
Las autoridades de República Dominicana, particularmente sensible a las tempestades por sus numerosos ríos, emitieron alerta roja en escuelas y playas, en tanto los puertos permanecían cerrados y los cuerpos de salvamento estaban listos para actuar.

La falta de luz en numerosos sectores del Gran Santo Domingo es palpable y en la ciudad colonial de la capital algunos vecinos llegaron a erigir una barricada de luz quemando ruedas, que fue apagada por la policía.
En algunas partes de la capital ya suman once horas sin luz.
Pese a que no ha habido ninguna respuesta oficial a la falta de luz, que en muchos casos está siendo suplida por el uso de generadores, la Corporación de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), informó en su cuenta de la red social twitter que como medida preventiva podría ser interrumpido el servicio en los lugares donde se produzcan inundaciones.
Además, la tormenta tropical ha obligado a la evacuación de 7,347 personas, causado daños a 823 viviendas e incomunicado tres comunidades a su paso por República Dominicana.
Erika se ensañó con Dominica, una pequeña isla de 72,000 habitantes, cuyas lluvias torrenciales causaron inundaciones y deslaves.
"Hasta ahora nos han confirmado que al menos 20 ciudadanos han muerto, y algunos están desaparecidos", dijo la noche del viernes el primer ministro de la isla caribeña, Roosevelt Skerrit, en un discurso a la nación.
"El daño que pude visualizar (...) me temo que pueda haber llevado nuestro proceso de desarrollo marcha atrás en unos 20 años", indicó el gobernante, quien acotó que "lo más preocupante, sin embargo, es la pérdida de vidas".
Destacó que hubo daños masivos a la infraestructura y que "cientos de hogares de todo el país han sido destruidos o se volvieron inseguros para ser ocupados".
En vista de los graves daños, la Organización de Estados Americanos (OEA) ofreció su apoyo a Dominica, donde numerosos puentes y carreteras, así como el aeropuerto, quedaron dañados.
Posible llegada a Florida
El NHC indicó que Erika podría incluso disiparse. Pero si sobrevive, llegaría el lunes a la costa oeste de Florida como una débil tormenta tropical.
De todas maneras, el gobernador de Florida Rick Scott decretó el estado de emergencia, lo que permite movilizar recursos para los servicios de emergencia y activar a la Guardia Nacional.
"La tormenta tropical Erika representa una seria amenaza para todo el estado de Florida y requiere que se tomen precauciones oportunas para proteger comunidades, infraestructura clave y el bienestar en general del estado", escribió el gobernador Scott al declarar el estado de emergencia.
Las autoridades en varios condados costeros de Florida distribuían sacos de arena para contener las aguas y pedían reforzar la protección de las viviendas, mientras la gente compraba agua potable, linternas, baterías y comida no perecedera en supermercados.
"Los preparativos están en marcha ante la posible llegada a Estados Unidos de Erika", dijo el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, quien agregó que el presidente Barack Obama se mantenía informado sobre los mismos.